Corrió el maratón en sus manos. El mejor premio no siempre es la medalla de oro

Como dice la sabiduría popular: Haz una buena acción y tírala al mar. Khemjira Klongsanun tiene dos perros y conoce bien las peculiaridades de estos animales.
Durante el maratón, vio un pequeño cachorro al costado de la pista, no había edificios residenciales ni personas cerca. Se llevó al cachorro con ella, pero no abandonó la carrera y continuó la competencia.

Corrió el maratón en sus manos. El mejor premio no siempre es la medalla de oro

Khemjira dice: “Me parecía que este pequeño iba a morir. No había edificios, ni animales, ni gente cerca.
Y recogí un cachorro para sacarlo de una situación peligrosa”.

Corrió el maratón en sus manos. El mejor premio no siempre es la medalla de oro

Nadie intervino en esta situación, ya que esto no está mencionado en las reglas del maratón. Pero otros participantes también estaban interesados ​​en el cachorro.
Khemjira no terminó el maratón con el mejor resultado, pero eso no es lo más importante.

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Luego le mostró el cachorro al veterinario. Después de los exámenes, el perro fue llevado a su nuevo hogar.
Resultó que ni siquiera es un mestizo, sino un perro de pura sangre y pertenece al bangwu tailandés.

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El cachorro se llamó Chombueng, en honor al lugar donde se llevó a cabo el maratón.

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