La persona más alta registrada en el Libro de los récords en 2019, a la edad de
32 años, tenía una altura de 224 cm.
Nos gustaría contarte cómo vive, qué preguntas le hacen los extraños y dónde
consigue ropa en talla 3XL para gente alta. Estar al lado de un hombre así te
hace sentir una sensación increíble y una sensación fantástica de la irrealidad
de lo que está sucediendo.
¡La gente lo mira como la octava maravilla del mundo! Por supuesto, muchos fingen
estar ocupados con sus teléfonos, pero en realidad miran en su dirección en
secreto e intercambian miradas.
Por un lado, tal atención puede ser molesta, por otro lado, gracias a su altura,
el hombre se hace amigo de personas interesantes. Más precisamente, los propios
habitantes se acercan a él primero.
Probablemente, si fuera una persona común, no tendría amigos tan interesantes ni
conexiones tan útiles. En la calle, personas de diversos campos vienen a su
encuentro: deportistas, empresarios, médicos, etc.
Las preguntas más comunes que hacen los demás son sobre la altura, el peso y el
tamaño del pie. Entre los temas cotidianos, a todos les interesa cuánto come,
qué tipo de cama tiene en casa, qué tan grande es el baño y si los techos del
apartamento son altos.
“Siempre tengo las respuestas listas, no es el primer año que las doy”, dice el
hombre. Por cierto, todos los muebles de su apartamento son de tamaño estándar,
los techos tienen una altura de 240 centímetros, solo que en lugar de candelabros
hay focos redondos, por lo que no hay colisiones.
Curiosamente, sus padres no son tan altos: su madre mide 175 cm, su padre 183 cm.
Aunque quedó la noticia de que uno de los bisabuelos medía 2,2 metros. Él mismo
ocupó el segundo lugar en la línea de educación física hasta el noveno grado. Sin
embargo, luego comenzó a crecer rápidamente a razón de 10 centímetros al año.
Resultó que el niño tenía un tumor pituitario. En su caso, la presión del tumor
sobre la glándula pituitaria provocó una producción excesiva de la hormona del
crecimiento.
Por lo tanto, a la edad de 14 años, tuvo que operarse. Si el problema se hubiera
descubierto más tarde, no solo habría seguido creciendo, sino que también podría
haberse quedado ciego debido a la alta presión en los nervios de sus ojos.