A la pequeña de la que hablaremos hoy no le gusta
el colegio, prefiere pasar tiempo con serpientes.
Su amistad con las cobras comenzó cuando Kajol gateaba
alrededor de ellas cuando era recién nacida,
y ahora se han convertido en sus compañeras favoritas.
Las cobras la mordieron varias veces y Kajol
quedó gravemente enferma, pero se recuperó por completo.
Su padre la salvó: la pequeña no tuvo tiempo
de asustarse al ver la sangre, porque corrió
hacia el bosque y regresó con una planta
medicinal cuyo nombre se mantiene en secreto.
Salvó la vida de la pequeña.
Los secretos familiares se transmiten de generación
en generación, y el padre está muy orgulloso de
dedicarse a una profesión tan difícil y
peligrosa como la caza de serpientes.
Por otro lado, los padres de Kajol temen que
la pequeña se quede sin amigos entre los niños
locales si continúa deambulando con cobras alrededor del cuello.
La madre de la niña dice que no le gusta
en absoluto la obsesión de su hija por las cobras.
A Salma le gustaría que Kajol superara rápidamente
su período de fascinación por los reptiles venenosos,
sobre todo porque la más joven fue expulsada
de la escuela por llevar a sus «mascotas» en una mochila.
Según ella, si fuera por ella se desharía de
las malditas cobras, pero su hija todavía las ama.
La familia de cazadores de serpientes,
sinceramente, tiene pocos invitados.
La gente tiene miedo de las cobras y se mantiene
alejada, incluso prohibiendo a sus hijos ser amigos de Kajol.
Esto preocupa a sus padres. Es más, Salma ya
piensa que a su hija le resultará difícil encontrar marido.
