Las redes sociales tienen muchas ventajas, pero también tienen desventajas que
preocupan mucho a algunos padres.
Una madre de Minnesota (EE. UU.) llamada Lorna Goldstrand Klefsaas no quería
que su hijo Sievert usara las redes sociales con demasiada frecuencia, pero no
solo iba a prohibirlo y encontró otra forma de distraer al niño del teléfono
inteligente.
Cuando Sievert tenía 12 años, su madre hizo una apuesta con él de que se
olvidaría de las redes sociales hasta la edad adulta y luego recibiría un
premio por ello: $1,800. El niño aceptó el desafío y alejó las redes sociales
de su vida durante seis años completos.
“En general no estoy en contra de las redes sociales, pero estoy a favor de
su uso saludable. La gente no debería depender de ellos”, dijo Lorna, la
madre de Sivert.
Han pasado seis años sin problemas ni crisis nerviosas por la falta de redes
sociales, pues antes de la apuesta Sievert aún no había tenido tiempo de
acostumbrarse y no creía que faltara mucho en no usarlas. Cuando el chico
cumplió 18 años, completó la tarea que le encomendó su madre y recibió su
trofeo de plata.
Como resultado, cuando el chico cumplió 18 años, completó con éxito la tarea
que le encomendó su madre y recibió su merecido trofeo en efectivo, que
gastará en arreglar una habitación en un dormitorio universitario.
Ahora Sievert es libre de usar las redes sociales, pero no pasa mucho tiempo
allí y es más probable que estudie o practique deportes.