El hombre hizo dinero fácil al convertirse en donante. Después de 30 años,
esultó que los pequeños nacidos de él viven en todo el mundo y quieren conocerlo.
Con dificultad, decide encontrarse con sus numerosos descendientes y no se arrepiente.
Peter Ellenstein trabajó como actor en Los Ángeles en su juventud. Según él,
había pocos papeles y no había suficiente dinero, por lo que
el hombre trabajó como donante durante varios años.
Después de 30 años, recibió un mensaje en su teléfono, del cual cayó en estupor:
le escribió una niña que lo buscaba y le agradecía la oportunidad de nacer.
“Es un momento muy delicado para los dos y entiendo la sorpresa que puede ser.
Nací en 1994 gracias a la FIV. Mi madre siempre quiso tener un hijo y las nuevas
tecnologías la ayudaron a hacer realidad su sueño.
Te escribo porque creo que tú “Es el dador. Si no quieres seguir en contacto conmigo,
o incluso si no respondes, lo entenderé y no presionaré. Solo quería decirte, gracias. »
La niña que le escribió a Peter se llama Rachel y, a través de pruebas de ADN,
localizó a 11 de sus medios hermanos y juntos intentaron identificar al donante.
Las madres les dijeron que el actor era el donante de esperma y dieron su nombre,
aunque esta información no suele revelarse en la FIV.
Peter recobró el sentido y accedió a conocer a Rachel, y un poco más tarde,
12 de sus hijos más aparecieron en todo el mundo. Peter ahora ve a todos sus
24 hijos con regularidad: pasan los fines de semana juntos o salen a comer.
Todos los niños son muy diferentes, altos y bajos, claros y oscuros,
pero son muy similares a su padre y entre ellos.