Ahora los británicos Helen y Graham tienen 41 y 42 años y se casaron recientemente.
Estos chicos se enamoraron en la escuela, cuando tenían 15 años, pero después de un
tiempo se vieron obligados a irse por culpa de sus padres. Sin embargo, la vida es
algo muy impredecible y, a veces, une a dos personas por una razón.
Helen Marshall y Graham Richardson se conocieron en la escuela cuando tenían 15 años:
estaban enamorados y comenzaron a salir. Después de nueve meses de citas y discotecas
en la escuela, el joven Graham le propuso matrimonio a Helen. Los padres temían que
fueran demasiado jóvenes e insistieron en que el chico fuera a la universidad.
Debido a estos desacuerdos, Graham se fue a estudiar.
Vivían en diferentes ciudades y se escribían cartas, pero en algún momento su
comunicación se detuvo por las dificultades de la distancia. Después de eso, cada
uno de ellos tuvo una relación a largo plazo e incluso tuvo hijos.
Helen estuvo casada durante 16 años y Graham durante 17 años. Pero cuando los dos
rompieron con sus parejas, Helen vio a Graham en la ciudad y luego decidió escribirle.
Resulta que todo este tiempo después de su separación, los dos se extrañaron y se
vieron brevemente cuando llevaban a los niños a la escuela. Después de la
correspondencia, los sentimientos de los amantes estallaron nuevamente, y después
de unos meses, Graham le propuso matrimonio a Helen, dándole el mismo anillo con
el que se arrodilló ante ella cuando tenía 15 años.
Helen, de 41 años, y Graham, de 42, se casaron y tuvieron una pequeña fiesta.
Ahora viven felices en la granja familiar donde vivía Graham. “Helen es mi alma
gemela. Soy introvertido, ella es extrovertida, me siento como en casa con ella.
Somos almas gemelas y estoy feliz de compartir nuestra hermosa historia de amor”,
dice Graham.
