Se sabe que existe una conexión especial e inexplicable entre los gemelos. Como
Edith Dumbleton y Dorcas Tobin de Inglaterra. Incluso después de celebrar su
cumpleaños número 101, van el uno al otro en cualquier clima, para abrazarse y
simplemente permanecer cerca.
Edith y Dorcas nacieron el 28 de junio de 1920 en Banbury. El padre de las niñas,
un ingeniero, murió cuando ellas tenían solo tres años. La madre tuvo que criar
sola a cinco hijos. La familia vivía pobremente, pero unida, en el amor y el
respeto mutuo.
Edith luego se casó con un hombre llamado Fredrik. Estuvieron casados durante más
de cincuenta años y criaron tres hijos juntos. Edith perdió a su esposo hace 15
años, murió a la edad de 89. El esposo de Dorcas tampoco vivió para ver estos días.
Murió a la edad de 80 años después de treinta felices años de matrimonio, en los
que nacieron dos hijos.
Casi toda su vida Edith y Dorcas vivieron juntas, pero hace ocho años, cuando la
salud de Edith comenzó a deteriorarse, se mudó a vivir con su hija Kristin. La
vista de la mujer ha disminuido mucho, camina mal, pero aún se apresura a encontrarse
con su hermana todas las semanas. Los gemelos solían turnarse para visitarse. Ahora
el camino se le está dando a Edith cada vez más difícil, por lo que cada vez cede
el turno a su hermana. Todos los martes, Dorcas, que vive con su hermano Robert, de
71 años, conduce dos horas hasta Leominster y le lleva a Edith su exclusivo budín
de pan o unos tomates. Y Edith, antes de su llegada, va a la tienda a comprarle una
barra de chocolate a su hermana. Cuando Dorcas no está, su hermana pasa mucho tiempo
en el jardín. Intenta moverse más y cuida las plantas durante horas.
Los cumpleaños de Edith y Dorcas siempre se han celebrado juntos, excepto el año
pasado, cuando debido a la cuarentena del coronavirus, la fiesta, su centenario,
tuvo que cancelarse. Afortunadamente, este año se levantaron las restricciones y las
mujeres pudieron pasar su cumpleaños con su familia en un pub local.
En una entrevista con The Epoch Times, las mujeres dijeron que estaban muy contentas
de poder vivir hasta esta edad. Todavía están llenos de energía y quieren «sacar
todo lo que puedan de la vida». Cuando se les pregunta cómo se las arreglan para
mantener su fuerza y energía, los gemelos responden que no hay ningún secreto especial
en su longevidad. Nunca siguieron dietas, no vivían en el lujo. Sin embargo, todavía
hay un secreto: según Edith y Dorcas, han aprendido a “vivir sin estrés”, disfrutando
cada día que pasan en la tierra.