Uno de los refugios en China recibió una llamada sobre un perro pequeño que vivía
junto a las vías del tren.
Estaba claro que los dueños habían decidido deshacerse de su mascota, dejándola en
un lugar lleno de peligros.
Cuando una chica que trabaja como voluntaria encontró al pobre perro, inmediatamente
le dio de comer. Resultó que tenía tanta hambre que con entusiasmo tomó la comida
directamente de las manos de la niña.
Después de que el perrito comió, la niña lo llevó al auto, lo llamó Daisy y lo llevó
a una clínica veterinaria.
Afortunadamente, durante el examen se descubrió que la niña estaba completamente sana,
sólo que muy consumida debido a la desnutrición, y el veterinario le recetó una buena
dieta.
Cuando llegaron a casa, la niña le dejó a Daisy un gran plato lleno de comida, que
inmediatamente devoró.
Se notaba que hacía mucho tiempo que no comía, casi se tragaba la comida sin masticar
los trozos.
Por ahora vive con la niña en acogida temporal, está ganando peso rápidamente y se
está convirtiendo en una perra cariñosa, sociable y amigable.
Esperamos que se puedan encontrar buenas personas dispuestas a convertirse en dueños
de este maravilloso perro.
Por lo general, para los animales jóvenes sin problemas de salud, los dueños se
encuentran muy rápidamente, por lo que la niña no está particularmente preocupada
por su feliz futuro.
Evaluación