No es de extrañar que se diga que Japón es el país más avanzado y progresista del mundo.
Pero el precio de tales logros es alto. En Japón la jornada laboral
es muy larga. Esto quita toda la energía de los empleados.
Por esta razón, las personas están constantemente cansadas y
tensas no solo al final del día, sino también durante todo el día cuando trabajan.
Por lo tanto, los empleadores encuentran diferentes formas de
aliviar la fatiga. El estado incluso tiene aceleradores
especiales para que los empleados se vayan a casa.
Y algunos gerentes pueden traer gatos al trabajo. ¡Sí,
entendiste bien! Una de las empresas japonesas también
ofreció bonificaciones a quienes traigan una mascota a la
oficina. Cierto, y mejor que sea un gato callejero, pero no doméstico.
Los empleados estaban muy entusiasmados con la idea.
Despertó su interés y los tiene mucho más. Ahora
la oficina está llena de animales. Algunos incluso
adoptaron varios gatos. A los oficinistas les gusta
trabajar en compañía de criaturas esponjosas y lindas.
La gerencia recibió el motivo por el cual se lanzó este
experimento: la resistencia al estrés y la productividad de
los empleados aumentaron considerablemente. Los gatos
sin hogar han encontrado un nuevo hogar.
Es mucho más cómodo y seguro vivir en la oficina que en la calle.
Lo más probable es que otros empleadores también se den cuenta de esta idea.
¿Trabajaría con más eficacia en un entorno así?