El primer cumpleaños de un niño es un gran hito en su vida, ¡y este día debe
celebrarse! Un pastel con una vela, globos, fotografías para el recuerdo: no
puede prescindir de ellos.
La madre de Boy Luke, Mandy Lewis, también ha decidido organizar una sesión de
fotos para su hijo, pero no en el estudio, sino en la granja de sus padres en
Carolina del Norte. Y esta decisión resultó ser muy correcta.
Al principio, la fotógrafa Christina Elmore pensó que sería una sesión de fotos
normal y corriente, como las demás. Nada, como dicen, presagiado. Hay muchos
animales en la granja, incluidas vacas con terneros.
Y lo que Christina no esperaba en absoluto era que le pidieran fotografiar a un
niño de un año junto a un ternero. Según el fotógrafo, fue inesperado, pero muy conmovedor.
Incluso si todo no salió bien. La cría de nombre Opal se resistió y no quiso ser
fotografiada, por lo que tuvo que ser llevada hasta el lugar de la fotografía en
sus brazos. Pero las fotos son geniales! Y ese día será recordado para siempre.